Durante el día, Andreas Aronsson es un técnico en informática pero, por las noches, es un gran artista dedicado a la creación de ilusiones ópticas en la forma de figuras imposibles. A primera vista las figuras, ingeniosamente dibujadas, parecen estar bien, pero luego de un examen cuidadoso la mente comienza a marearse cuando se interna en la profunda complejidad de los dibujos.
El aspecto general de la figura mostrada a la derecha es un triángulo, pero su forma es más intrincada de lo que sugiere esa descripción. En realidad es un doble tribar —o sea, un triángulo imposible de Penrose— con otros tres tribares dobles asociados.
Hay muchos más dibujos asombrosos en la página de Andreas Aronsson (epígrafes en inglés)
Los europeos, desde la más remota antigüedad hasta bien pasado el Renacimiento, creían que había una gran variedad de bestias extrañas en el mundo, viviendo en los océanos, en los lejanosrincones del mundo o en el sótano de sus vecinos. Si proyectamos la imaginación hacia un futuro posible: ¿qué clase de monstruos turbará la mente de los futuros exploradores espaciales? No creo que estemos en condiciones razonables de poder anticiparlo. Quizás, incluso la misma idea de la exploración espacial sea monstruosa.
En una serie anterior, recorrimos en 22 pasos un museo de monstruos ficticios. Esta vez nos toca aprender sobre los monstruos marinos que inquietaban a quienes se internaban en las profundidades del océano. Los marinos contemporáneos de Colón no pensaban, en contra de lo que se cree popularmente, que navegarían hasta dar con el borde exterior de la Tierra. Sin embargo, estaban atemorizados por lo que podrían encontrar durante sus viajes. Su concepción de la vida marina se alejaba bastante de la realidad y comprendía desde suposiciones poco exactas sobre el comportamiento de las especies conocidas hasta representaciones imaginarias de animales que podían existir.
Año: 1734. Científico: Albertus Seba. Artista: J. Fortuÿn (coloración). Publicado por primera vez en: Thesaurus. Publicación actual: "A Diverse and Marvelous Collection", de Müsch, Willmann y Rust en Natural History Magazine, de Abril de 2002, y A Cabinet of Natural Curiosities, de Albertus Seba.
El boticario Albertus Seba, de Amsterdam, retrató otra hidra en el siglo XVIII. Seba dudaba de su autenticidad pero más de un "testigo presencial" respondió por la exactitud del especimen disecado, de manera que publicó este dibujo de la criatura. Es comprensible el error de Seba puesto que los animales más auténticos eran preservados en alcohol o disecados en el momento en que le llegaban.
¿Todavía están buscando un buen propósito para el año nuevo? Pueden tomar en cuenta el siguiente para 2009, el Año Internacional de la Astronomía: sólo tienen que mirar hacia arriba y vivenciar los cambios del cielo, aprender sobre ellos y disfrutarlos.
En esta ocasión les presentamos un video a intervalos (o time-lapse) de poco más de 4 m de duración, una composición de 7 mil imágenes que destaca mucho de lo que pueden ver. La Luna, el Sol y las estrellas trazan arcos en el cielo al reflejar majestuosamente la rotación axial de la Tierra. Pero la secuencia también muestra satélites y meteoros surcando el espacio, nubes que al desplazarse por el horizonte cambian en hermosos tornasolados y, como si fuera poco, radiantes rayos crepusculares.
Esta noche, martes 30 de diciembre de 2008, y mañana miércoles, último día del año, habrá conjunciones para disfrutar en el cielo del oeste, poco después de la puesta de Sol:
En la imagen —creada con Stellarium, como así también la siguiente— se observa el cielo de esta noche a las 21:50 h de Buenos Aires (clic en la imagen para ampliarla). Venus, el planeta más luminoso, se encuentra a 24 grados de altura con una magnitud de -4,26. Siete grados debajo —o sea, unos 14 discos lunares— le apunta con unos cuernos bien afilados una Luna bien esbelta, con apenas un 10 por ciento de su superficie iluminada. Alineado con la Luna y Venus y entre ambos —aunque más cerca de este último— se encuentra el planeta Neptuno, sólo visible con largavistas o un telescopio pequeño. Si se continúa la alineación hacia el cenit se encuentra Urano, otro de los planetas gaseosos del Sistema Solar, que también sólo es posible ver con la ayuda de instrumentos.
En el otro extremo de la alineación se encuentra la otra conjunción planetaria: Mercurio y Júpiter, suspendidos apenas a 6 y 5 grados por encima del horizonte —ayer los pude ver porque se encontraban justo en un sector del cielo donde hay una depresión en la línea marcada por la altura de las casas del vecindario—. Júpiter, con una magnitud de -1,51, es bastante más luminoso que Mercurio, -0,77; a los fines de la observación esto significa que Júpiter se verá antes que Mercurio y sólo habrá que esperar un par de minutos más para que éste se haga visible. De más está decir que por la baja altura de ambos planetas, este agrupamiento sólo se podrá ver por unos minutos.
La novedad más importante de la noche del 31 de diciembre salta a la vista (clic en la imagen para ampliarla): la Luna, un poco más iluminada, alcanza a Venus en su marcha hacia el este y entre ambos crean una conjunción bastante apretada, como un lejano recuerdo de la conjunción de la cara sonriente de principios de mes. Respecto de la conjunción entre Mercurio y Júpiter, el planeta gigante se acerca cada vez más al horizonte, de modo que será visible por menos tiempo aún que el día anterior.
Como ven, el cielo también se prepara para festejar la llegada del año nuevo. Espero que puedan festejar a lo grande y aprovecho la oportunidad para desearles un muy buen 2009.
Los europeos, desde la más remota antigüedad hasta bien pasado el Renacimiento, creían que había una gran variedad de bestias extrañas en el mundo, viviendo en los océanos, en los lejanosrincones del mundo o en el sótano de sus vecinos. Si proyectamos la imaginación hacia un futuro posible: ¿qué clase de monstruos turbará la mente de los futuros exploradores espaciales? No creo que estemos en condiciones razonables de poder anticiparlo. Quizás, incluso la misma idea de la exploración espacial sea monstruosa.
En una serie anterior, recorrimos en 22 pasos un museo de monstruos ficticios. Esta vez nos toca aprender sobre los monstruos marinos que inquietaban a quienes se internaban en las profundidades del océano. Los marinos contemporáneos de Colón no pensaban, en contra de lo que se cree popularmente, que navegarían hasta dar con el borde exterior de la Tierra. Sin embargo, estaban atemorizados por lo que podrían encontrar durante sus viajes. Su concepción de la vida marina se alejaba bastante de la realidad y comprendía desde suposiciones poco exactas sobre el comportamiento de las especies conocidas hasta representaciones imaginarias de animales que podían existir.
Año: 1635. Científico: Juan Eusebio Nieremberg. Publicado por primera vez en: Historia Naturae. Publicación actual: The Science of Describing de Brian W. Ogilvie.
Gesner imaginó que la morsa —a la que designó como "rosmarus"— y la llamada "morss piscis" (en la imagen) eran la misma criatura. Tal identificación fue todo un logro, si se toma en cuenta lo poco que se parecían. Este dibujo particularmente borroso y rudimenario fue probablemente realizado a partir de una piel seca. Debido a los especímenes mal preservados y a las ilustraciones poco claras, no se reconoció que ambos animales eran en realidad uno sólo hasta fines del siglo XVII. Nieremberg publicó esta ilustración en un libro sobre criaturas extrañas, la mayor parte de las cuales procedían del Nuevo Mundo. Un animal muy parecido también fue incluído en un grabado del museo del naturalista Ferrante Imperato.
No hay como estar en casa. El astronauta Greg Chamitoff mira detenidamente por una ventana de la Estación Espacial Internacional (ISS por sus iniciales en inglés) y contempla el planeta en el que todos hemos nacido:
(clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande). A unos 350 km de altura, la ISS está tan alta que la curvatura del horizonte de la Tierra se hace evidente. La ventana por la que mira el astronauta Chamitoff muestra en color blanco algunas de las complejas nubes de la Tierra y, en azul, la atmósfera y los océanos, esenciales para la vida. La estación espacial gira alrededor de la Tierra cada 90 minutos, aproximadamente. No es difícil para la gente que vive abajo devolverle la mirada a la ISS. A menudo (*) la estación espacial se ve como un punto de luz brillante vagando por encima nuestro poco después de la puesta del Sol:
La Estación Espacial Internacional pasa por encima de la ciudad de Lauffen en el sur de Alemania, poco después del lanzamiento del transbordador Discovery en la misión STS-124 (clic en la imagen para ampliarla).Más información.
Los telescopios incluso pueden resolver la estructura general de la ISS:
La imagen mostrada al comienzo de la entrada fue tomada el mes pasado desde el Laboratorio Kibo de la ISS.
Vía Foto astronómica del día correspondiente al 30 de diciembre de 2008. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito: Tripulación de la Expedición 18 Crew, NASA (en inglés).
(*) Para darle un poco de sentido numérico a la frase, en este 2008 que ya se acaba pude observar el pasaje de la ISS en casi 50 oportunidades —46 veces, por si hace falta ser más preciso—. El último de ellos fue anoche. De lo que no llevo la cuenta es de las veces que siendo posible la observación no pude lograrla: un pasaje muy bajo, obstrucción por algún árbol o edificio, presencia de nubes, fragilidad de memoria, etc.
Los europeos, desde la más remota antigüedad hasta bien pasado el Renacimiento, creían que había una gran variedad de bestias extrañas en el mundo, viviendo en los océanos, en los lejanosrincones del mundo o en el sótano de sus vecinos. Si proyectamos la imaginación hacia un futuro posible: ¿qué clase de monstruos turbará la mente de los futuros exploradores espaciales? No creo que estemos en condiciones razonables de poder anticiparlo. Quizás, incluso la misma idea de la exploración espacial sea monstruosa.
En una serie anterior, recorrimos en 22 pasos un museo de monstruos ficticios. Esta vez nos toca aprender sobre los monstruos marinos que inquietaban a quienes se internaban en las profundidades del océano. Los marinos contemporáneos de Colón no pensaban, en contra de lo que se cree popularmente, que navegarían hasta dar con el borde exterior de la Tierra. Sin embargo, estaban atemorizados por lo que podrían encontrar durante sus viajes. Su concepción de la vida marina se alejaba bastante de la realidad y comprendía desde suposiciones poco exactas sobre el comportamiento de las especies conocidas hasta representaciones imaginarias de animales que podían existir.
Año: 1558. Científico: Conrad Gesner. Publicado por primera vez en: De Piscium & Aquatilium Animantum Natura. Publicación actual: The Science of Describing de Brian W. Ogilvie.
Al contrario de lo que podríamos creer hoy, los naturalistas del Renacimiento descreían bastante de muchas de las descripciones e ilustraciones que encontraban. Gesner, sin embargo, como vivía de un pequeño salario en un país mediterráneo, estaba imposibilitado de ver con sus propios ojos la mayoría de las criaturas marinas. Debía confiar en el trabajo de otros, entre ellos un libro de Olaus Magnus sobre la Europa septentrional. De las criaturas marinas de Magnus, Gesner escribió: "Parece que representó muchas [criaturas marinas] según los cuentos de los marineros en vez de la vida [real]". No obstante, Gesner publicó este cuadro de una morsa. Pero tenía una gran reserva acerca del dibujo: "Los peces no tienen pies". Admitía que las aletas podían asemejarse a pies en algunos esqueletos grandes de peces, pero pensó que el artista se había tomado demasiadas libertades en ese dibujo (lo que es cierto). ¿Por qué Gesner pensó que la morsa era un pez? Los naturalistas del siglo XVI no sólo lidiaban con animales extraños sino también con sus propios métodos de clasificación.
NGC 1569: Una galaxia irregular enana con estallido estelar
Las grandes galaxias espirales parecen llevarse a menudo toda la gloria al exhibir cúmulos de estrellas jóvenes, azules y brillantes en hermosos brazos espirales simétricos. Pero las pequeñas galaxias irregulares también forman estrellas:
(clic en la imagen para ampliarla, o verla aún más grande). De hecho y tal como se muestra en la imagen de hoy, es evidente que la galaxia enana NGC 1569 está experimentando un aumento brusco de actividad de formación estelar, el que se piensa comenzó hace más de 25 millones de años. El turbulento entorno resultante es abastecido por explosiones de supernovas (ver al pie de la entrada), por cuanto dichas detonaciones cósmicas vierten materia al medio ambiente que desencadena otras formaciones de estrellas. A la izquierda del centro de esta magnífica imagen obtenida por el Telescopio Espacial Hubble son visibles dos cúmulos estelares masivos —los equivalentes juveniles a los cúmulos estelares globulares de la Vía Láctea, nuestra propia galaxia espiral—. La imagen mostrada arriba cubre un campo de unos 8 mil años-luz en NGC 1569. Por cuanto dicha galaxia cuenta con un aumento repentino de formación estelar y se encuentra relativamente cerca —a no más de 11 millones de años-luz de la Tierra—, NGC 1569 ofrece una excelente oportunidad para que los astrónomos estudien las poblaciones estelares en las galaxias que evolucionan rápidamente. NGC 1569 se encuentra en la constelación del cuello largo de La Jirafa (Camelopardalis en latín).
Vía Foto astronómica del día correspondiente al 29 de diciembre de 2008. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito: Hubble Heritage Team (STScI/AURA), NASA (en inglés).
M74, un ejemplo de una gran galaxia espiral:
(clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande). M74 o NGC 628, un universo isla de alrededor de 100 mil millones de estrellas, se encuentra en la Constelación de Piscis a 30 millones de años-luz de distancia y es similar en muchos aspectos a la Vía Láctea. Más información (en inglés).
La recreación, en apenas 20 segundos, de la explosión de una supernova:
Los europeos, desde la más remota antigüedad hasta bien pasado el Renacimiento, creían que había una gran variedad de bestias extrañas en el mundo, viviendo en los océanos, en los lejanosrincones del mundo o en el sótano de sus vecinos. Si proyectamos la imaginación hacia un futuro posible: ¿qué clase de monstruos turbará la mente de los futuros exploradores espaciales? No creo que estemos en condiciones razonables de poder anticiparlo. Quizás, incluso la misma idea de la exploración espacial sea monstruosa.
En una serie anterior, recorrimos en 22 pasos un museo de monstruos ficticios. Esta vez nos toca aprender sobre los monstruos marinos que inquietaban a quienes se internaban en las profundidades del océano. Los marinos contemporáneos de Colón no pensaban, en contra de lo que se cree popularmente, que navegarían hasta dar con el borde exterior de la Tierra. Sin embargo, estaban atemorizados por lo que podrían encontrar durante sus viajes. Su concepción de la vida marina se alejaba bastante de la realidad y comprendía desde suposiciones poco exactas sobre el comportamiento de las especies conocidas hasta representaciones imaginarias de animales que podían existir.
Año: 1558. Científico: Conrad Gesner. Publicado por primera vez en: De Piscium & Aquatilium Animantum Natura. Publicación actual: Monsters of the Sea de Richard Ellis, Merchants and Marvels de Smith y Findlen (ed.), y "Foils and Fakes" de Suzanne Magnanini en Marvels & Tales Magazine.
Hércules luchó contra una hidra en la antigua mitología griega y, desde entonces, este animal imaginario ha tenido una pésima reputación. Por desgracia, la hidra tiene un pariente vivo, si se puede decir eso: el pulpo. Aún hoy persisten ideas falsas sobre el pulpo —también llamado el "pez del diablo"— y ha sido condenado a interpretar el papel de villano en más de una película de segunda categoría. Si bien en esta ilustración la hidra tiene sólo siete cabezas, a veces se afirmaba que tenía nueve y que dos nuevas cabezas aparecerían si una de ellas le era cortada. Esta representación de una hidra era típica de la época, esto es, un dibujo copiado de otro dibujo, tomado probablemente de una publicación sobre el Apocalipsis. Aunque Gesner publicó esta imagen, sin embargo era muy escéptico sobre la existencia de la criatura.
Densas y opacas nubes de gas y polvo interestelar se recortan sobre un rico campo de estrellas y gas de hidrógeno resplandeciente en este primer plano, obtenido por el Telescopio Espacial Hubble, de IC 2944, una brillante región de formación estelar ubicada en Centauro, a 5900 años-luz de distancia:
(clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande). El más grande de estos glóbulos oscuros, observado por primera vez por el astrónomo sudafricano A. D. Thackeray en 1950, es probablemente la combinación de dos nubes distintas, cada una de las cuales mide más de un año-luz de longitud, que se superponen desde nuestra perspectiva. En conjunto, ambas nubes contienen la materia equivalente a 15 veces la masa del Sol, ¿pero realmente van a colapsar y formar estrellas masivas? Además de otros datos, las nítidas imágenes del Hubble indican que los glóbulos de Thackeray se fracturan y se mueven constantemente debido a la intensa radiación ultravioleta procedente de estrellas jóvenes y calientes que ya excitaban y calentaban la brillante nebulosa de emisión. Estos glóbulos oscuros y otros similares que se sabe que están asociados con otras regiones de formación estelar podrían, finalmente, ser disipados por su medio ambiente hostil, al igual que trozos cósmicos de manteca en una sartén caliente.
Vía Foto astronómica del día correspondiente al 28 de diciembre de 2008. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito: Hubble Heritage Team (STScI/AURA), NASA (en inglés).
Una panorámica de la Vía Láctea completa, en la que se pueden apreciar la riqueza de algunos campos estelares, aludidos al principio de la entrada:
(clic en la imagen para ampliarla tres veces). Es un mosaico de 51 fotografías tomadas por Axel Mellinger desde California, Sudáfrica y Alemania entre los años 1997 y 2000 (más información). Otras imágenes y panorámicas astrofísicas del mismo autor (en inglés).
En la mañana de un día como hoy, pero hace 437 años, nacía un hombre con una mente genial y a la vez enferma. Incluso, pudo haber sido un asesino. Johannes Kepler se hizo famoso por haber descubierto las tres leyes del movimiento planetario y por su trabajo pionero en óptica; además escribió uno de los primeros libros de ciencia ficción, el Somnium o El Sueño, que trataba sobre la Luna.
Pero al igual que Newton, Kepler tenía un lado oscuro. Era susceptible, mentiroso, ladrón, codiciaba la gloria y estaba poseído por la furia. Pero a pesar de carecer de toda moralidad, fue un científico brillante y genial. La gente que desconfía de la ciencia podría decir: "Por supuesto, tal como von Braun, que usaba mano de obra esclava para construir cohetes". Pero creo que éstas son aberraciones groseras, muy alejadas de las normas del comportamiento normal de los seres humanos en general y de los científicos en particular. Kepler fue honrado con un cráter menor en el Océano de las Tempestades (en la imagen), donde su supuesta víctima, Tycho Brahe, recibió el cráter más destacado de la Luna. De este cráter parten dos rayos brillantes que apuntan de manera directa —¿y también acusadoramente?— hacia Kepler.
Fuente: Chuck Wood para Foto lunar del día correspondiente al 27 de diciembre de 2008. Al igual que APOD respecto de la astronomía en general, esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía relacionada con la Luna, además de una breve explicación. Crédito de la imagen: NASA History Office (Apollo 12 - AS12-52-7745).
Nota: Me cuesta creer en la semblanza que Chuck Wood presenta de Kepler, y más habiéndome formado el retrato de este astrónomo a partir de la lectura de Los sonámbulos, de Arthur Koestler. Pero, para empeorar las cosas, sobre este último también pesan algunas acusaciones. Trataré de conseguir el libro sobre Kepler de los Gilder.
Los europeos, desde la más remota antigüedad hasta bien pasado el Renacimiento, creían que había una gran variedad de bestias extrañas en el mundo, viviendo en los océanos, en los lejanosrincones del mundo o en el sótano de sus vecinos. Si proyectamos la imaginación hacia un futuro posible: ¿qué clase de monstruos turbará la mente de los futuros exploradores espaciales? No creo que estemos en condiciones razonables de poder anticiparlo. Quizás, incluso la misma idea de la exploración espacial sea monstruosa.
En una serie anterior, recorrimos en 22 pasos un museo de monstruos ficticios. Esta vez nos toca aprender sobre los monstruos marinos que inquietaban a quienes se internaban en las profundidades del océano. Los marinos contemporáneos de Colón no pensaban, en contra de lo que se cree popularmente, que navegarían hasta dar con el borde exterior de la Tierra. Sin embargo, estaban atemorizados por lo que podrían encontrar durante sus viajes. Su concepción de la vida marina se alejaba bastante de la realidad y comprendía desde suposiciones poco exactas sobre el comportamiento de las especies conocidas hasta representaciones imaginarias de animales que podían existir.
Año: 1694. Científico: Pierre Pomet. Publicado por primera vez en: Histoire Générale des Drogues. Publicación actual: The Unicorn de Nancy Hathaway.
Pomet realizó ilustraciones de un unicornio marino (arriba) y un narval (abajo). La segunda criatura, a diferencia de la primera, era real y su cuerno a menudo se confundía con —o se le hacía pasar adrede como— un cuerno de unicornio, el que se creía que podía curar toda clase de enfermedades y envenenamientos. Como las principales familias europeas mostraban una gran afición por el envenenamiento de sus propios familiares, siempre había demanda para tales antídotos. No mucho después de que se publicara el libro de Pomet, los científicos identificaron al narval como un "unicornio falso".
El Púlsar del Cangrejo, una estrella de neutrones magnetizada del tamaño de una ciudad que gira sobre sí misma a 30 revoluciones por segundo, se encuentra en el centro de esta notable imagen obtenida por el Observatorio Espacial Chandra:
(clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande). La imagen de rayos X profundos presenta la primera vista completa de los complejos límites de la nebulosa de viento del Púlsar del Cangrejo. El púlsar, al igual que una dínamo cósmica, impulsa la emisión de rayos X. La energía del púlsar acelera partículas cargadas y produce fantasmagóricos y relucientes chorros de rayos X que surgen de los polos, junto con un viento intenso en la dirección ecuatorial. Los fascinantes bordes se crean a medida de la corriente de partículas cargadas fluye y se aleja, pero termina perdiendo su energía en la interacción con el fuerte campo magnético del púlsar. El propio púlsar giratorio (escuchar el sonido del púlsar), que cuenta con una masa mayor que la del Sol y la densidad de un núcleo atómico, es el núcleo colapsado de una estrella masiva. El colapso del núcleo estelar dio origen a una explosión de supernova, observada en el año 1054. Esta imagen del Chandra cubre casi 9 años-luz a una distancia estimada para el Cangrejo de 6 mil años-luz.
M1, La Nebulosa del Cangrejo, tomada por el Telescopio Espacial Hubble (clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande).Más información.
Vía Foto astronómica del día correspondiente al 27 de diciembre de 2008. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito: NASA / CXC / SAO / F. D. Seward, W. H. Tucker, R. A. Fesen (en inglés).
Un video (36 seg.) que reconstruye la explosión de la supernova que dio origen a la Nebulosa del Cangrejo o Crab Nebula, ocurrida en el año 1054 de nuestra era:
Los europeos, desde la más remota antigüedad hasta bien pasado el Renacimiento, creían que había una gran variedad de bestias extrañas en el mundo, viviendo en los océanos, en los lejanosrincones del mundo o en el sótano de sus vecinos. Si proyectamos la imaginación hacia un futuro posible: ¿qué clase de monstruos turbará la mente de los futuros exploradores espaciales? No creo que estemos en condiciones razonables de poder anticiparlo. Quizás, incluso la misma idea de la exploración espacial sea monstruosa.
En una serie anterior, recorrimos en 22 pasos un museo de monstruos ficticios. Esta vez nos toca aprender sobre los monstruos marinos que inquietaban a quienes se internaban en las profundidades del océano. Los marinos contemporáneos de Colón no pensaban, en contra de lo que se cree popularmente, que navegarían hasta dar con el borde exterior de la Tierra. Sin embargo, estaban atemorizados por lo que podrían encontrar durante sus viajes. Su concepción de la vida marina se alejaba bastante de la realidad y comprendía desde suposiciones poco exactas sobre el comportamiento de las especies conocidas hasta representaciones imaginarias de animales que podían existir.
Año: 1558. Científico: Conrad Gesner. Publicado por primera vez en: De Piscium & Aquatilium Animantum Natura. Publicación actual: Curious Woodcuts of Fanciful and Real Beasts de Conrad Gesner y The Book of Fabulous Beasts de Joseph Nigg.
Olaus Magnus fue el primero en dar a conocer a la "ballena barbuda", a la que describió como una ballena con cuernos que se parecía a "un árbol arrancado de raíces". Esta representación fantasiosa podría haberse inspirado en un avistamiento parcial o fugaz de un animal real, quizás un calamar gigante.
Como la ilustración de un cuento galáctico de Just So Story, la Nebulosa de la Trompa de Elefante zigzaguea por el complejo IC 1396, formado por una nebulosa de emisión integrada en el centro de un joven cúmulo estelar, en la alta y alejada Constelación de Cefeo:
(clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande). En realidad, esta trompa de elefante cósmica mide más de 20 años-luz de largo. La composición en falso color de hoy se tomó a través de filtros de banda estrecha que sólo dejaron pasar la luz emitida por los átomos de hidrógeno (en verde), azufre (en rojo) y oxígeno (en azul) que pueblan la región. La imagen resultante destaca la forma retrotraída de las crestas que contornean los bolsones de gas y polvo interestelar frío. Dichas nubes oscuras, inmersas en la nebulosa y con forma de zarcillos, contienen la materia prima para la formación de estrellas y oculta protoestrellas en el interior del polvo cósmico.
Una imagen del interior de la Trompa de Elefante, tomada por el Telescopio Espacial Spitzer (clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande).Más información.
El relativamente tenue complejo IC 1396 se encuentra a unos 3 mil años-luz de distancia y abarca un extensa región del cielo, de poco más de 5 grados. Por su parte, el primer plano espectacular mostrado más arriba cubre un campo de 2 grados de ancho, cerca del tamaño de 4 Lunas Llenas.
Vía Foto astronómica del día correspondiente al 26 de diciembre de 2008. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito y copyright: Gordon Haynes (en inglés).
Para comparar, otra imagen de la Trompa de Elefante en otra escala y sin filtros de banda estrecha, tomada por Brian Lula:
Leo en Mental Floss que la gente de WebEcoist publicó una súper ronda de fotografías sobre el medioambiente. Si bien todas las fotos de esta nota son alucinantes, se destacan en particular las del cazador de tormentas Eric Nguyen:
Al mirarlas es posible obtener, por lo menos, una vaga idea tanto de la fuerza de ese remolino salvaje como también de lo hermosas y cautivadoras que esas tormentas pueden llegar a ser. Por supuesto, por sólo mirar no es posible sentir ninguno de los inconvenientes que suelen ocasionar. Es una sensación muy parecida a cuando uno contempla la imagen de la colisión de galaxias espirales o la ilustración de un agujero negro: son objetos magníficos pero mejor tenerlos a una distancia prudente.
Actualización: Veo en Menéame que la última de las tormentas parece haberse reproducido vía Photoshop y ha desarrollado su furia digital sobre diversos geopíxeles de la Tierra. ¿Qué queda de natural en la naturaleza?
Los europeos, desde la más remota antigüedad hasta bien pasado el Renacimiento, creían que había una gran variedad de bestias extrañas en el mundo, viviendo en los océanos, en los lejanosrincones del mundo o en el sótano de sus vecinos. Si proyectamos la imaginación hacia un futuro posible: ¿qué clase de monstruos turbará la mente de los futuros exploradores espaciales? No creo que estemos en condiciones razonables de poder anticiparlo. Quizás, incluso la misma idea de la exploración espacial sea monstruosa.
En una serie anterior, recorrimos en 22 pasos un museo de monstruos ficticios. Esta vez nos toca aprender sobre los monstruos marinos que inquietaban a quienes se internaban en las profundidades del océano. Los marinos contemporáneos de Colón no pensaban, en contra de lo que se cree popularmente, que navegarían hasta dar con el borde exterior de la Tierra. Sin embargo, estaban atemorizados por lo que podrían encontrar durante sus viajes. Su concepción de la vida marina se alejaba bastante de la realidad y comprendía desde suposiciones poco exactas sobre el comportamiento de las especies conocidas hasta representaciones imaginarias de animales que podían existir.
Año: 1560. Científico: Conrad Gesner. Publicado por primera vez en: Icones Animalium. Publicación actual: Monsters of the Sea de Richard Ellis.
Gesner fue uno de los naturalistas más dotados artísticamente del siglo XVI, pero fallaba de vez en cuando. En este grabado en madera, una ballena madre y su cría parecen terriblemente porcinas.
Una Piel de Zorro, un Unicornio y un Arbol de Navidad
El intenso resplandor de las nubes de hidrógeno domina este colorido panorama celestial en la tenue pero fantástica Constelación del Unicornio (Monoceros):
(clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande). En la imagen de hoy contemplamos la región de formación estelar designada como NGC 2264, un complejo revoltijo de gas y polvo cósmico que se encuentra a unos 2700 años-luz de distancia y que mezcla nubes de polvo interestelar con nebulosas de emisión rojizas excitadas por la intensa radiación proveniente de las estrellas recién formadas. Las nubes de polvo generalmente oscurecen la vista pero donde estén cerca de estrellas jóvenes y brillantes también reflejan la luz estelar, formando nebulosas de reflexión azules. Este amplio mosaico fotográfico se extiende por tres cuartos de grado —o sea, una vez y media el disco de la Luna Llena— en el cielo terrestre, una extensión que llevada a la distancia de NGC 2264 equivale a 40 años-luz. El reparto de personajes cósmicos comprende la Nebulosa Piel de Zorro, cuya piel enrevesada se encuentra arriba y a la izquierda, la brillante estrella variable S Mon inmersa en una neblina de tonos azulados apenas por debajo de la Piel de Zorro, y la Nebulosa del Cono en el extremo derecho. Las estrellas de NGC 2264 también se conocen como el cúmulo estelar del Arbol de Navidad. La forma de árbol triangular trazada por las estrellas aparece de lado en la imagen de arriba: el ápice yace en la Nebulosa del Cono y el centro de la amplia base cerca de S Mon. En la siguiente imagen (clic para ampliarla) el árbol está de pie:
Vía Foto astronómica del día correspondiente al 25 de diciembre de 2008. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito y copyright: R Jay Gabany (en inglés).
(clic en la imagen para ampliarla, o en al pie de esta página hay enlaces para verla mucho más grande y completa). Es una imagen tomada por el Telescopio Espacial Spitzer mediante la combinación de dos de sus instrumentos: el IRAC y el MIPS. Además de Arbol de Navidad, algunos astrónomos la apodan el cúmulo del Copo de Nieve debido a que las estrellas parecen haberse formado a intervalos regularmente espaciados a lo largo de estructuras lineales y en una configuración que se asemeja al patrón de un copo de nieve.
Los europeos, desde la más remota antigüedad hasta bien pasado el Renacimiento, creían que había una gran variedad de bestias extrañas en el mundo, viviendo en los océanos, en los lejanosrincones del mundo o en el sótano de sus vecinos. Si proyectamos la imaginación hacia un futuro posible: ¿qué clase de monstruos turbará la mente de los futuros exploradores espaciales? No creo que estemos en condiciones razonables de poder anticiparlo. Quizás, incluso la misma idea de la exploración espacial sea monstruosa.
En una serie anterior, recorrimos en 22 pasos un museo de monstruos ficticios. Esta vez nos toca aprender sobre los monstruos marinos que inquietaban a quienes se internaban en las profundidades del océano. Los marinos contemporáneos de Colón no pensaban, en contra de lo que se cree popularmente, que navegarían hasta dar con el borde exterior de la Tierra. Sin embargo, estaban atemorizados por lo que podrían encontrar durante sus viajes. Su concepción de la vida marina se alejaba bastante de la realidad y comprendía desde suposiciones poco exactas sobre el comportamiento de las especies conocidas hasta representaciones imaginarias de animales que podían existir.
Año: 1622. Científico: Caspar Schott. Publicado por primera vez en: Physica Curiosa. Publicación actual: Visual Cultures of Science de Luc Pauwels (ed.).
Caspar —también conocido como Gaspar o Kaspar— Schott fue un antiguo estudiante y colaborador durante muchos años del jesuita y gran pensador alemán Athanasius Kircher. Además de preparar y defender la obra de Kircher, Schott publicó algunos trabajos suyos. Esta página, tomada del segundo volumen de su Physica Curiosa, muestra un variado surtido de monstruos marinos, entre ellos un pez que se asemeja a un monje (arriba a la izquierda), un monstruo marino que sospechosamente se parece a un obispo (abajo a la derecha) y dos criaturas quiméricas con colas largas y pisciformes. Representaciones similares aparecieron en numerosos trabajos de los siglos XVI y XVII. Las tensiones religiosas de la época pudieron haber contribuido al gran parecido entre los presuntos monstruos y los personajes eclesiásticos.
Hace cuarenta años, en diciembre de 1968, la tripulación de la Apolo 8 voló de la Tierra a la Luna y regresó a nuestro planeta poco después. Frank Borman, James Lovell y William Anders fueron lanzados en la parte superior de un cohete Saturno V el 21 de diciembre, dieron diez vueltas alrededor de la Luna en el módulo de mando y regresaron a la Tierra el 27 de diciembre:
(clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande). La misión Apolo 8 dejó una impresionante lista de primicias, entre las cuales se cuentan el haber sido los primeros seres humanos en viajar hacia la luna de la Tierra, la primera tripulación en haber sido impulsada por un Saturno V y la primera misión en haber fotografiado la Tierra desde el espacio profundo. Al surgir el módulo de mando desde la cara oculta de la Luna, la tripulación del Apolo 8 podía ver a la Tierra como si se elevara por sobre el horizonte lunar. En realidad, puesto que la Luna siempre nos muestra la misma cara ese fenómeno es ilusorio y la salida de la Tierra se debía al movimiento orbital del módulo de mando. Tomaron entonces esa famosa fotografía de un alejado planeta azul sobre el limbo lunar, un maravilloso regalo ofrecido al mundo del que habían partido.
Vía Foto astronómica del día correspondiente al 24 de diciembre de 2008. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito: Apollo 8, NASA (en inglés).
El transbordador espacial Endeavour de la NASA regresó hace poco al Centro de Procesamiento de Transbordadores, sito en el Centro Espacial Kennedy de la NASA en la Florida, luego de haber cumplido una misión exitosa a la Estación Espacial Internacional. Como el transbordador es un modelo de nave espacial reutilizable, posee un ciclo de preparación, de ejecución y de recuperación. Desde 1992, el Endeavour ya completó este ciclo 22 veces.
La gente de The Big Picture le dedicó uno de sus excelentes reportajes fotográficos (31 fotos) al último ciclo completo del Endeavour, que comenzó con el aterrizaje de su misión anterior (STS-123) el 26 de marzo de 2008, el despliegue en la torre de lanzamiento (19 de septiembre), el despegue desde el Centro Espacial Kennedy (14 de noviembre) y el regreso, pasados 9 meses y habiendo recorrido más de 10 millones y medio de km, a la base de la Florida, luego de cumplir con la misión STS-126.
Debido al mal tiempo, el Endeavour no pudo aterrizar, como es habitual, en la Florida, sino que debió descender en la Base Edwards, en el desierto de Mojave, California. En la imagen (clic para verla mucho más grande), el Endeavour regresa al Centro Espacial Kennedy montado sobre un Boeing 747 modificado (10 de diciembre).
La sonda MESSENGER, en el más reciente de sus grandes servicios a la humanidad, logró ubicar la base secreta de la Reina Borg en nuestro planeta Mercurio:
(clic en la imagen para ampliarla). La imagen fue tomada justo cuando dicho organismo se asomaba desde las profundidades del cráter Kertész, ubicado en el limbo occidental de la gigantesca cuenca Caloris.
Seguramente la reina habrá pensado que podría pasar desapercibida o que sería confundida con una pareidolia. No way, madam.
¿Es esta percha un cúmulo estelar o un asterismo? Los astrónomos debatieron durante gran parte del siglo pasado si este objeto visible con largavistas era en verdad un cúmulo abierto de estrellas físicamente asociadas o una proyección fortuita sobre la bóveda celeste:
(clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande). Las proyecciones fortuitas se conocen bajo el nombre de asterismos, de los cuales El Gran Carro —en la Osa Mayor— o La Tetera son ejemplos muy conocidos:
(clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande). Recientes mediciones tomadas con gran precisión desde distintos puntos de la órbita que la Tierra recorre alrededor del Sol revelaron desplazamientos angulares discrepantes que indican que La Percha es, en realidad, un asterismo. Esta brillante y multicolorida agrupación estelar, conocida de manera más formal como Collinder 399, es más grande que la Luna Llena y se encuentra en la Constelación boreal de la Zorra (Vulpecula). Cerca del borde derecho de la imagen se distingue un verdadero cúmulo abierto de estrellas: NGC 6802.
Vía Foto astronómica del día correspondiente al 23 de diciembre de 2008. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito y copyright: Procesamiento, Noel Carboni; generación de imagen: Greg Parker, New Forest Observatory (en inglés).
Los europeos, desde la más remota antigüedad hasta bien pasado el Renacimiento, creían que había una gran variedad de bestias extrañas en el mundo, viviendo en los océanos, en los lejanosrincones del mundo o en el sótano de sus vecinos. Si proyectamos la imaginación hacia un futuro posible: ¿qué clase de monstruos turbará la mente de los futuros exploradores espaciales? No creo que estemos en condiciones razonables de poder anticiparlo. Quizás, incluso la misma idea de la exploración espacial sea monstruosa.
En una serie anterior, recorrimos en 22 pasos un museo de monstruos ficticios. Esta vez nos toca aprender sobre los monstruos marinos que inquietaban a quienes se internaban en las profundidades del océano. Los marinos contemporáneos de Colón no pensaban, en contra de lo que se cree popularmente, que navegarían hasta dar con el borde exterior de la Tierra. Sin embargo, estaban atemorizados por lo que podrían encontrar durante sus viajes. Su concepción de la vida marina se alejaba bastante de la realidad y comprendía desde suposiciones poco exactas sobre el comportamiento de las especies conocidas hasta representaciones imaginarias de animales que podían existir.
Año: 1817. Publicación actual: Monsters of the Sea de Richard Ellis.
"El lunes y martes por la mañana fue vista una serpiente jugando alrededor del puerto entre Eastern Point y la isla Ten Pound. La cabeza y el cuerpo de la criatura sobresalían unos 2,5 m del agua, tenía la cabeza perfectamente formada y tan grande como la de un caballo, además se estima que el cuerpo medía entre 13 y 15 m de largo". Así se leía en un volante impreso en Boston acerca de un monstruo marino avistado en Gloucester, Massachusetts, en 1817. El dibujo, realizado en ese entonces, muestra al presunto monstruo marino (ver una imagen mucho más grande). Numerosos testigos oculares fueron a la costa para presenciar las travesuras de la serpiente marina y unos niños encontraron lo que se creyó en un principio era un vástago de la criatura. Sin embargo, un naturalista especializado en reptiles dictaminó que la cría de la serpiente marina era en realidad una culebra deformada.
¿Podrían comportarse algunos accidentes de la superficie de Encélado como una cinta transportadora (1)? Así lo indica una de las interpretaciones más importantes de las imágenes tomadas recientemente de la luna más explosiva de Saturno:
(clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande). Es probable que esta forma de actividad tectónica asimétrica, casi inexistente en la Tierra, permita obtener claves sobre la estructura interna de Encélado, que podría contener mares líquidos por debajo de la superficie congelada en los cuales la vida sería capaz de desarrollarse.
La imagen de hoy es una composición de 28 imágenes tomadas por la nave robótica Cassini (clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande) en octubre de 2008 inmediatamente después de que pasara rozando por el orbe de los penachos de hielo de agua. El examen de dichas imágenes muestra algunos desplazamientos tectónicos evidentes, en los que grandes parcelas de la superficie parecen moverse todas en una dirección. Cerca de la parte superior de la imagen se encuentra una de las divisiones tectónicas más destacadas: Labtayt Sulci (2), un cañón de aproximadamente un kilómetro de profundidad.
Vía Foto astronómica del día correspondiente al 22 de diciembre de 2008. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito: Cassini Imaging Team, SSI, JPL, ESA, NASA (en inglés).
(1) ¿Qué es una cinta transportadora?
Nos lo explica una de las escenas más recordadas de El show de Lucy.
(2) La denominación Labtayt Sulci proviene de Labtayt, la capital de Sultanato de Rüm en el cuento "La ciudad de Labtayt", incluído en Las mil y una noches.