viernes, junio 05, 2009

Diez cosas que no sabías sobre el Hubble (8)

El transbordador espacial Discovery partió el 24 de abril de 1990 hacia el espacio llevando a bordo un objeto revolucionario: el Telescopio Espacial Hubble. A la fecha era el telescopio óptico más grande y más sensible lanzado al espacio y, aunque en un principio no funcionó correctamente, no tardó en tomar algunas de las imágenes astronómicas más asombrosas y hermosas de todos los tiempos.

Cuando se diseñó al Hubble se tuvo en cuenta que éste pudiera ser actualizado periódicamente y al tiempo que se publican estas líneas los astronautas del transbordador espacial Atlantis (STS-125) están por instalar dos cámaras nuevas, además de reparar otras dos y reemplazar toda una serie de piezas del Hubble. Como la presente misión de mantenimiento del telescopio es la última prevista, éste parece ser un buen momento para escribir sobre el Hubble.

Además aunque posiblemente sea el telescopio más famoso del mundo —y casi podría asegurarse que es el único que la gente conoce por su nombre— aún así es muy probable que haya varias cosas acerca del Hubble que sorprenderán a más de un lector. Estas razones impulsaron a Phil Plait a publicar diez breves entradas sobre este venerable telescopio, como en su momento lo hizo con la Galaxia de la Vía Láctea y Plutón. Por supuesto, nadie subestima a los seguidores del blog y los hay muy versados en todo lo que tenga que ver con la astronomía. Sin embargo, hay muy buenas razones para creer que ninguno conocerá todas y cada una de las cosas tratadas en las diez secciones de esta serie —a menos, claro está, que haya operado el telescopio—, más aún cuando Phil Plait contará su propia experiencia con el observatorio. La serie promete ser muy interesante. Como ocurrió con las series anteriores, iré traduciendo y publicando las secciones durante los próximos días.


No todas las observaciones del Hubble están programadas

El Hubble está equipado con varias cámaras ubicadas en la parte de atrás del observatorio, la sección más ancha, detrás del espejo —a diferencia de un telescopio común y corriente, el espejo del Hubble no se encuentra en el fondo del tubo sino a un tercio de distancia de la "popa"—. Cada cámara ve una región del cielo ligeramente diferente, separada por algunos arcominutos. En comparación, la Luna, por ejemplo, tiene 30 arcominutos de ancho. En consecuencia, si una cámara apunta al núcleo de la Galaxia de Andrómeda, las otras podrán observar puntos cercanos al centro de la galaxia pero no exactamente allí.

Aquí se inicia el Programa Paralelo. Cuando en 1997 se instaló una nueva grabadora de estado sólido en el Hubble, la capacidad del observatorio para registrar datos aumentó de forma considerable, ya que anteriormente se almacenaba la información en unidades de cinta. La red de procesamiento de datos era capaz de almacenar información de tres cámaras en simultáneo, por lo que además de la cámara principal, también podían obtener datos otros dos instrumentos.

Cuando se observaba algún objetivo primario a veces se rotaba al Hubble para apuntar con las otras cámaras hacia otro punto interesante, como sucedió con las observaciones lunares. En otros casos simplemente se registraba lo que aparecía. Este procedimiento se dio en llamar el Programa Paralelo, por cuanto las otras cámaras se usaban en paralelo con la principal.

En octubre de 1997 el Hubble apuntó a la Gran Nube de Magallanes, una pequeña galaxia que gira en torno de la Vía Láctea. El instrumento principal era la cámara planetaria y de gran angular 2 (WFPC2), pero la cámara en la que Phil Plait trabajaba, el espectrógrafo de imágenes del telescopio espacial (STIS), cumplía tareas en paralelo. Eso ocurría muy a menudo y una de las primeras cosas que hacía al llegar a la oficina por las mañanas era revisar la información enviada por el STIS de regiones del universo que nunca nadie había visto y buscar algo interesante en los datos.

La mayor parte del tiempo no había mucho para ver: sólo había galaxias borrosas o jirones de nebulosas. A veces la cámara principal observaba una galaxia cercana muchas veces durante varios meses y, luego de un tiempo, era posible reconocer la galaxia en cuestión con sólo mirar el brillo y la densidad de las estrellas.

Pero un día se rompió la monotonía cuando el Hubble observó la Gran Nube de Magallanes y en la imagen apareció una pequeña mancha de forma vagamente circular. Era una pequeña nebulosa planetaria formada por el gas que expulsa una estrella moribunda. Pueden verla en la imagen y una ampliación en el recuadro (clic en la imagen para ampliarla). Lamentablemente para Phil Plait ya la habían descubierto, de manera que no era un objeto nuevo y, por lo tanto, tampoco pudo proponer un nombre para designarla. De todas maneras obtuvo tan buenos datos espectrográficos que le fue posible realizar un diagnóstico de la nebulosa no realizado hasta ese momento.

Los nuevos datos dieron incluso para publicar un artículo. Cuenta que el trabajo con el STIS a veces era muy entretenido, pero rara vez podía publicarse algo. Con todo, cuando se publicaba era gratificante, aunque su nombre no apareciera entre los primeros colaboradores.

El Programa Paralelo todavía sigue en actividad, aunque Phil Plait ya no trabaje más en el proyecto. No se sabe qué otros objetos se habrán encontrado merced a este programa, pero todo es cuestión de revisar los archivos. Queda como una tarea pendiente.

Fuente: Bad Astronomy Blog (en inglés).

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