martes, diciembre 30, 2008

El 2008 se despide con dos noches de conjunciones

Esta noche, martes 30 de diciembre de 2008, y mañana miércoles, último día del año, habrá conjunciones para disfrutar en el cielo del oeste, poco después de la puesta de Sol:

En la imagen —creada con Stellarium, como así también la siguiente— se observa el cielo de esta noche a las 21:50 h de Buenos Aires (clic en la imagen para ampliarla). Venus, el planeta más luminoso, se encuentra a 24 grados de altura con una magnitud de -4,26. Siete grados debajo —o sea, unos 14 discos lunares— le apunta con unos cuernos bien afilados una Luna bien esbelta, con apenas un 10 por ciento de su superficie iluminada. Alineado con la Luna y Venus y entre ambos —aunque más cerca de este último— se encuentra el planeta Neptuno, sólo visible con largavistas o un telescopio pequeño. Si se continúa la alineación hacia el cenit se encuentra Urano, otro de los planetas gaseosos del Sistema Solar, que también sólo es posible ver con la ayuda de instrumentos.

En el otro extremo de la alineación se encuentra la otra conjunción planetaria: Mercurio y Júpiter, suspendidos apenas a 6 y 5 grados por encima del horizonte —ayer los pude ver porque se encontraban justo en un sector del cielo donde hay una depresión en la línea marcada por la altura de las casas del vecindario—. Júpiter, con una magnitud de -1,51, es bastante más luminoso que Mercurio, -0,77; a los fines de la observación esto significa que Júpiter se verá antes que Mercurio y sólo habrá que esperar un par de minutos más para que éste se haga visible. De más está decir que por la baja altura de ambos planetas, este agrupamiento sólo se podrá ver por unos minutos.

La novedad más importante de la noche del 31 de diciembre salta a la vista (clic en la imagen para ampliarla): la Luna, un poco más iluminada, alcanza a Venus en su marcha hacia el este y entre ambos crean una conjunción bastante apretada, como un lejano recuerdo de la conjunción de la cara sonriente de principios de mes. Respecto de la conjunción entre Mercurio y Júpiter, el planeta gigante se acerca cada vez más al horizonte, de modo que será visible por menos tiempo aún que el día anterior.

Como ven, el cielo también se prepara para festejar la llegada del año nuevo. Espero que puedan festejar a lo grande y aprovecho la oportunidad para desearles un muy buen 2009.

Continuación: La despedida celestial del 2008.