domingo, octubre 19, 2008

El jardín de los muchos mundos que se bifurcan

Leo en SF Signal que Rachel VanCott (en inglés) propone un breve recorrido por la historia de la noción de los mundos paralelos:
Póngase un dedo en el oído... ¿lo hizo? Si la llamada "Interpretación de los Muchos Mundos de la mecánica cuántica" es correcta, existe por lo menos un universo en el que lo hizo, otro en el que no y universos para todos los estadios intermedios. El físico Hugh Everett III tenía sólo 27 años cuando introdujo esta interpretación —también conocida como la "Teoría de los Mundos Paralelos"— en la versión publicada de su tesis doctoral de 1957. Según la teoría de Everett, cada evento que puede ocurrir de más de una forma, incluso algo tan simple como la manera en que respondió al pedido que abre este párrafo, acciona una división que genera múltiples universos que, en conjunto, contienen todos los resultados posibles. Esta noción, aunque novedosa para la ciencia, es antigua en la ciencia ficción.
A continuación la autora introduce a los escritores y físicos, entre ellos H. G. Wells, Thomas Young, William Fitzgerald Jenkins, Erwin Schrödinger, Niels Bohr y Jorge Luis Borges, que contribuyeron a desarrollar, en sus respectivas disciplinas, dicho concepto y explica brevemente las características de sus aportes. Como queda claro, en este universo no me corresponde traducir dichas aclaraciones.

La obra de Borges tiene algunas curiosas anticipaciones o paralelismos con teorías físicas. Pueden leer este artículo de Alberto Rojo sobre el tema.

En particular, el cuento de Borges que anticipa la teoría de Everett es El jardín de los senderos que se bifurcan —originalmente publicado en Ficciones, quizás el libro que más me gusta de él; si no leiste este cuento podés descargarlo desde aquí—, un laberinto que no afecta al espacio, a diferencia de los comunes, sino al decurso del tiempo.