miércoles, marzo 30, 2011

NGC 5584 y la expansión del universo


NGC 5584 es una galaxia grande y hermosa, con mas de 50 mil años-luz de diámetro. Se encuentra a 72 millones de años-luz de distancia, en dirección de la constelación de Virgo (clic en la imagen para ampliarla a 900 x 793 píxeles o verla aún más grande).

Los amplios brazos espirales de este magnífico universo-isla está colmado no solo de cúmulos de estrellas jóvenes y brillantes sino también de oscuras bandas de polvo. No obstante, NGC 5584 no es sólo otra bonita galaxia espiral que los astrónomos del planeta Tierra pueden observar de cara.

Esta galaxia es la sede de alrededor de 250 cefeidas, un tipo de estrellas variables, y una explosión de supernova del Tipo Ia (*), objetos clave para determinar distancias en astronomía. NGC 5584 es una de las 8 galaxias incluidas en un nuevo estudio que cuenta, además, con observaciones del Telescopio Espacial Hubble, y con el que se busca mejorar la medición de la Constante de Hubble, es decir, la tasa de expansión del universo.

Los resultados del estudio favorecen a la teoría que sostiene que la aceleración de la expansión del universo se debe a la energía oscura, con lo que pierden peso los modelos que intentan explicar la aceleración observada sin recurrir a la misteriosa energía oscura.

En esta detallada imagen de NGC 5584 tomada por el Hubble, la mayor parte de las pequeñas manchas rojizas son distantes galaxias del fondo cósmico.

Los anillos rojos y ondulados de SNR 0509. ¿Cuál es la causa de las pintorescas ondulaciones que afectan el remanente de supernova SNR 0509-67.5? Esta región se observó con un nivel de detalle sin precedentes con el Telescopio Espacial Hubble en 2006 y luego otra vez a finales del año pasado. El color rojo corresponde a lo que registra el Hubble cuando utiliza un filtro que selecciona la radiación H-Alfa del hidrógeno. La causa precisa de estas ondulaciones sigue siendo desconocida, aunque se piensa que está relacionada con la densidad del gas presente en el medio que las rodea: o bien el gas fue expulsado por la supernova o bien fue barrido por el estallido. En cambio, se comprende mejor la forma anillada del remanente, ya que su velocidad de expansión permite conectarlo a una supernova de tipo Ia (*) que ha debido producirse unos 400 años antes (clic en la imagen para ampliarla). Leer la entrada completa.

Vía Foto astronómica del día correspondiente al 30 de marzo de 2011. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito: NASA, ESA, A. Riess (STScI/JHU), L. Macri (Texas A & M Univ.) et al., Hubble Heritage (STScI / AURA).


(*) Supernovas y remanentes de supernovas

Aproximadamente cada 50 años una estrella masiva de nuestra galaxia vuela en pedazos en una explosión de supernova (ver videos y animaciones). Las supernovas son uno de los acontecimientos más violentos del universo y la fuerza de la explosión genera un destello cegador de radiación y ondas expansivas similares a un estampido.

Inicialmente se había clasificado a las supernovas de acuerdo con sus propiedades ópticas. Las supernovas del Tipo II muestran pruebas evidentes de hidrógeno en los desechos en expansión eyectados en la explosión mientras que no ocurre lo mismo con las supernovas del tipo Ia. Investigaciones recientes permitieron refinar dichos tipos y proponer una clasificación según los tipos de estrellas que dan lugar a las supernovas. Una explosión del Tipo II, así como las de Tipo Ib y Tipo Ic, se producen por el colapso catastrófico del núcleo de una estrella masiva. Una supernova del Tipo Ia ocurre por una súbita explosión termonuclear que desintegra una estrella enana blanca.

Las supernovas del Tipo II se producen en regiones con muchas estrellas jóvenes y brillantes, tales como los brazos espirales de las galaxias. Al parecer no ocurren en las galaxias elípticas, cuya población dominante está compuesta por estrellas antiguas de poca masa. Puesto que las estrellas jóvenes y brillantes son típicamente estrellas con una masa 10 veces más grande que la del Sol, esta prueba, además de otras, permite concluir que las estrellas masivas producen las supernovas del Tipo II.

Algunas supernovas del Tipo I tienen numerosas características en común con las supernovas del Tipo II. Tales supernovas, clasificadas como Tipo Ib y Tipo Ic, se diferencian al parecer de las del Tipo II porque han perdido su envoltura externa de hidrógeno antes de la explosión. La envoltura de hidrógeno pudo haberse perdido debido a una vigorosa emisión de materia anterior a la explosión o porque fue arrancada por una estrella acompañante. Más información (en inglés).