miércoles, junio 15, 2016

Confirman una segunda fuente de ondas gravitacionales en GW151226




Un nuevo cielo se hace visible. Cuando miran hacia el cielo lo ven tal como aparece según la luz, es decir, como radiación electromagnética. Pero justo cuando se acababa el 2015, los investigadores han comenzado a ver el cielo tal como aparece según otro tipo de radiación, las ondas gravitacionales.

El proyecto LIGO anunció hoy la detección de GW151226, el segundo flash confirmado de ondas gravitacionales tras GW150914, la histórica primera detección registrada tres meses antes.

Como su nombre lo implica, GW151226 fue registrado en los últimos días de diciembre de 2015. Fue detectado de forma simultánea por las instalaciones de LIGO situadas en los estados norteamericanos de Washington y Louisiana.

En el video de arriba, una animación muestra cómo cambia la frecuencia de GW151226 durante las mediciones llevadas a cabo por el detector de Hanford (Washington).

El sistema emisor de las ondas gravitacionales es consistente con la fusión de dos agujeros negros (ver el video al pie de la entrada) con masas iniciales de unas 14 y 8 masas solares y un desplazamiento al rojo de alrededor de 0,09. Esto significa, suponiendo que la interpretación es correcta, que las ondas gravitacionales tardaron aproximadamente 1 400 millones de años en llegar hasta nosotros.

Tomen en cuenta que el brillo y la frecuencia de las ondas gravitacionales, representadas en el video como sonido, alcanza el máximo durante el último segundo de la fusión de los agujeros negros.

Conforme LIGO continúe en servicio, su sensibilidad siga aumentado y otros detectores de ondas gravitacionales se vayan sumando a la investigación, es seguro que la nueva visión del cielo modificará nuestra comprensión del universo.

Simulan la fusión de dos agujeros negros. Esta simulación está inspirada por la primera detección directa de ondas gravitacionales llevada a cabo por el experimento LIGO y muestra en cámara lenta un fenómeno que en tiempo real duraría alrededor de un tercio de segundo. En el marco de un escenario cósmico, los agujeros negros se encuentran delante de estrellas, gas y polvo. A medida que se acercan en órbitas espiraladas, la extrema gravedad de los agujeros negros desvía, por un efecto de lente, la luz detrás de ellos y forma anillos de Einstein, hasta que, finalmente, se fusionan en un único agujero negro. La ondulación y la dispersión observadas en las imágenes, tanto dentro como fuera de los anillos de Einstein e incluso después de que los agujeros negros se han fusionado, son un efecto de las ondas gravitacionales, de otra manera invisibles, generadas al compás de la rápida coalescencia de esos objetos masivos. Las ondas gravitacionales detectadas por LIGO, catalogadas como GW150914, son consistentes con la fusión de agujeros negros de 36 y 29 masas solares y que se hallen a una distancia de 1 300 millones de años-luz. El agujero negro producto de la fusión posee 62 veces la masa del Sol, mientras que las 3 masas solares faltantes se han convertido en energía bajo la forma de ondas gravitacionales (clic en la imagen para ampliarla). Leer la entrada completa.

Vía Foto astronómica del día correspondiente al 15 de junio de 2016. Esta página ofrece todos los días una imagen, fotografía o video del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito de la ilustración: LIGO, NSF.

Nota: Síganme en Twitter (@astrosofista) para saber más sobre el universo y mi mundo. Desde que comencé a tuitear hace diez equinoccios, unos 47 mil tweets ilustran y amplían las más de 4400 entradas publicadas en el blog desde su inicio, en mayo de 2004. ¿Qué esperan para unirse a esta gran conversación? Ya somos más de tres mil.

1 Sofismas:

El mar jun 21, 11:58:00 a.m. 2016, Blogger Julia escribió...

Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.

 

Publicar un comentario

<< Home