martes, febrero 12, 2008

Cómo Google llegó a su colorido logotipo

En esta nota publicada en Wired (en inglés), Sonia Zjawinski entrevista a Ruth Kedar quien describe ocho sucesivas versiones del logotipo que diseñó para Google en conexión con las ideas que Sergey Brin y Larry Page —los fundadores de la empresa— querían comunicar a sus usuarios. En lo que sigue resumo los aspectos centrales de la nota. En la imagen se muestran pequeños detalles de los logotipos —ordenados de izquierda a derecha y de arriba hacia abajo—, para ver las versiones completas sigan los enlaces.


Desde el principio, Brin y Page tuvieron en claro que querían un logotipo en vez de un logo. Kedar mantuvo la legibilidad del texto y agregó un toque de alegría a las dos letras "o" mediante colores primarios y bidimensionalidad. El patrón entre ambas letras se relaciona con la idea de una actividad que tiende al infinito. En la segunda versión se trabajó sobre una única "o"; el retículo sugiere una actividad centrada en un objetivo y precisa a la vez: Google es más que nada un proveedor de búsquedas y no un portal como Yahoo. La tercera versión del logotipo parece dar un paso en falso: los anillos entrelazados —a semejanza de los olímpicos— son una metáfora de que las búsquedas van tan lejos como que involucran a diferentes culturas y países.

En la cuarta versión se eligieron letras mayúsculas buscando una apariencia más empresarial y sólida pero sin llegar al extremo, pues se mantuvo la alegría con el cambio del tamaño de las letras y el coloreado. Los colores no respetan el orden del arco iris, dando a entender que las cosas no son tal como el usuario espera que sean: Google es algo distinto. A Brin y Page les gustó la lupa y el retículo, pero juntos recargaban demasiado al logotipo. La siguiente versión dejó de lado el retículo y la posibilidad de ver a través de la lupa. La sonrisa representa los resultados felices y una experiencia positiva en el proceso de búsqueda. El color de la primera y última letra es el mismo, pero en las intermedias hay mucha variedad, cuya traducción simbólica es dar cuenta de las diferentes rutas que una búsqueda puede seguir a resultas de la amplia información proporcionada por Google.

La sexta versión del logotipo marcó un regreso al concepto original de Brin, pero con un cambio de tipografía que no prosperó; la dimensionalidad se logra mediante el sombreado de las letras y la proyección de sombras, además de combinar trazos finos y gruesos. El logotipo parece flotar sobre la página de búsquedas, de la que ya se sabía que tendría un diseño muy claro y un fondo blanco. Cuenta Kedar que discutieron cuántos colores tendría Google y la progresión de colores más adecuada. La séptima versión marcó el momento de la simplificación del diseño. Se abandonaron los objetos reconocibles para evitar que la empresa llegue a quedar limitada por éstos —la lupa, por ejemplo, se asocia con naturalidad a la búsqueda de información pero no a las otras áreas a las que luego, como es sabido, Google se dedicó—. Con el juego de ángulos y colores de las letras, la diseñadora intentó dejar en claro que Google no era una empresa convencional.

En la octava y definitiva versión del logotipo se eligieron los colores primarios para las letras pero en lugar de seguir en orden el patrón de color pusieron un color secundario en la ele, queriendo dar a entender que Google no seguía las reglas convencionales y establecidas: era, definitivamente, una empresa innovadora.

Entrada relacionada: La evolución de los logos de empresas tecnológicas.